CGT en Acción
En estos días el mundo parece tomar consciencia sobre el irremediable daño que estamos produciendo al planeta. De tirios a troyanos manifiestan su preocupación por el cambio climático, incluso, aquellos que hace 4 días negaban que lo que está ocurriendo tuviera nada que ver con la mano del hombre y el uso/abuso de nuestros recursos naturales, y especialmente de los combustibles fósiles.
Eso lo sostenían con argumentos como “porque sé lo decía un primo ingeniero”, otras cosas tan seriamente razonadas como esta, o simplemente porque su palabra era dogma de fe.
En una nueva muestra de madurez social, y especialmente la de nuestros “dirigentes”, ha tenido que aparecer una adolescente para que veamos la luz. Parece ser que nada existe antes de esta aparición. Todas las personas militantes que se han dejado la piel denunciando nuestro modo de vida, sus causas y efectos, los científicos que han sido sometidos a escarnio por evidenciar el cambio climático, o los activistas sociales, organizaciones y algún sindicato (como CGT) que llevan años trabajando seriamente para cambiar nuestra realidad no son, ni existen, ni se les conocen.
Y el sistema capitalista, si lo siento, hay que nombrarlo aunque parezca antiguo, ya está (desde hace mucho tiempo) realizando su campaña de marketing, su lavado de cara. Todos se han convertido al ecologismo, las primeras las compañías eléctricas, que han y explotan las “magnificas y tan ecológicas centrales nucleares”, entre otras.
Y además ya tenemos para ello un bonito nombre en ingles, solo faltaría. El Greenwashing define esta práctica, que como si fuera un milagroso detergente, convierte a la empresa más impresentable, en adalid de la defensa del planeta. No son tontos, saben lo facilones que somos con la publicidad, lo que nos gusta creernos todo lo que nos cuentan en los mas media, solo hace falta meterle una caja bonita, un lazo rojo, y “voila”, compramos.
Es posible que de aquí a poco hasta las fabricas de armamento hagan misiles ECO, “Matamos sin ensuciar el medio ambiente” podría ser el lema, o también; “Por unas muertes limpias, mantenemos el planeta intacto”, “Hacemos Armas verdes”.
Hoy la agenda es el cambio climático, y lo hacen como todo, como si el mundo fuera un parque temático. “Vamos a salvar el planeta”, como si el hambre, la guerra, la brutal injusticia social, las desigualdades (la primera entre mujeres y hombres), no fueran ahora el problema. Estamos en la transversalidad, hoy ricos y pobres salvaremos al mundo juntos, hasta los seres humanos que se ahogan en el mediterráneo intentando llegar a nuestra tierra prometida, procuraran morir sin contaminar las aguas que acogen su fin.
Perdonen si resulto molesta, si enturbio “este festival verde”, pero nuestra hipocresía no tiene limites, y sobre todo la de quienes mandan.
Lo cierto es que o tomamos consciencia de cual es el verdadero problema, de quienes son los responsables de verdad, de que debemos cambiar de arriba abajo los parámetros de nuestra sociedad, de que no habrá ecologismo de verdad sin justicia social, o nada haremos. Si no unimos nuestras luchas, no saldremos del barrizal, nos seguirán vendiendo su producto caducado, su mierda envuelta en ecologismo, feminismo, o lo que sea. Que no te engañen, organízate y lucha. Ah, por cierto, y por si hay alguna duda el único capitalista (aunque sea ecologista) bueno, es el capitalista muerto. Salud y anarquía.
CGT en Acción
El cagallero de la Tenaza con voz propia, prescindiendo de ácratas capullos y descamisaos.
Por fin un articulo que razona y razona bien.
Solo una observación; La propaganda siempre es falsa, manipuladora y mentirosa, siempre y venga de donde venga está concebida para confundir voluntades y fabricar servidumbres en tontos y pobres de espíritu que posiblemente no merezcan otra cosa. De igual modo que el esclavo que no quiere ver la necesidad de no depender de «un amo», seguramente merece su esclavitud por su inconsciencia cerril. La Libertad es y será siempre el reconocimiento de una necesidad. No hay otra respuesta, al menos una respuesta que sea razonable y es lamentable que de la palabra «Libertad», «razón» y otras tantas palabras hermosas, que han perdido su significado a causa de las gárgaras, que bocas sucias e infames han hecho de ellas meras piltrafas. ¡¡¡OJO!!! la propaganda siempre es tóxica, la propague quien la propague. Fin del relato.
Emili Justicia